La Ingravidez de los Problemas

Mente intrínseca, que atiborras de imágenes mi pálida existencia, eres ambrosía inocua de mis pensamientos paranoides, única luz que me muestra el camino a casa; no importa que todo me falte si estas aqui cuando te necesite, bombardeando con tu napalm de suspicacias el desierto estéril de mis promesas entreveradas.
Una sórdida mañana desperté en los laberintos impunes de tu sádica locura y me senti feliz y asustado a la vez, senti una angustia leve en ese instante e imagine que todo estaba en mi contra otra vez escape como pude pero solo habia muros.
Todo estaba en mi contra.
La cordura esta sobrevalorada en el hilo del tiempo.